El mejor conocimiento de la biología y las bases moleculares de los tumores está facilitando el desarrollo de nuevas terapias antitumorales, dirigidas específicamente a atacar los puntos débiles de cada tumor.  Así se ha puesto de relieve en el congreso de la  American Society of Clinical Oncology que se clausura hoy en Chicago.

Como ejemplo de esta emergente investigación en el ámbito de la Medicina de Precisión aplicada a las enfermedades oncológicas, durante este encuentro científico destacan las aportaciones efectuadas por la Dra. Maria Schwaederle, del Centro de Tratamiento Personalizado del Cáncer en la Universidad de California (San Diego), que ha presentado datos de 346 ensayos clínicos experimentales con 13,203 pacientes; de todos estos estudios, 58 utilizaron una aproximación de precisión. A pesar de que los ensayos fueron diseñados para probar sólo la toxicidad, también se han descubierto enormes beneficios para los pacientes.

Como dato más significativo, se ha indicado que los tumores se redujeron en un 31% de los casos cuando el medicamento se adaptaba a las debilidades del tumor, mientras que la tasa de disminución de tumores sólo fue del 5% cuando no se empleó esta estrategia. Es más, se ha encontrado que el tiempo que transcurre hasta la progresión del tumor se duplica con la Medicina de Precisión, pasando de una media de tres meses a casi seis meses.

Esto, según la propia Dra. Schwaederle, “es sorprendente” y producto “de los avances impresionantes que se están registrando en nuestra capacidad para llevar a cabo el estudio genómico" que estaba revelando el funcionamiento interno de los tumores.