La genómica aproxima un abordaje más preciso de la esclerosis múltiple

Una investigación publicada en Journal of Neurology, Neurosurgery & Psychiatry” confirma que la acumulación de ciertas variantes genéticas de riesgo podrían estar asociadas con más recaídas y la progresión más rápida de la discapacidad en personas con esclerosis múltiple (EM).

El estudio sugiere que la influencia genética en el curso de la EM es, como era previsible, poligénica, siendo un producto de una gran cantidad de variantes genéticas de riesgo, ninguna de los cuales individualmente son suficientes para causar la enfermedad. Igualmente, se confirma que, además de ser un producto de múltiples factores genéticos, el curso de la enfermedad está claramente influenciado por todo tipo de factores ambientales, tales como los tratamientos modificadores de la enfermedad (TME), la exposición de la vitamina D, y potencialmente la exposición a agentes infecciosos.

En el estudio se secuenciaron los genomas completos de 127 personas que habían experimentado un primer episodio clínico sugestivo de EM. Posteriormente, los autores se centraron en un conjunto específico de 116 variantes de genes que se sabe que aumentan el riesgo de que una persona pueda desarrollar EM. Los participantes fueron seguidos durante 5 años para evaluar el número de recaídas, la tasa de progresión de la discapacidad y la conversión a EM clínicamente definida. El objetivo del estudio era ver si había alguna asociación entre estos 116 polimorfismos de nucleótido único (SNPs) y el curso de la enfermedad en un periodo de 5 años.

Los autores dividieron los SNPs en dos categorías: los localizados en los genes del antígeno leucocitario humano (HLA), que codifican para las proteínas que utiliza el sistema inmune para reconocer partículas extrañas, y los que no se encontraban en esa localización.
Se ha observado que 7 SNPs no HLA se asociaron con la conversión a EM y/o riesgo de recaída, pero  ninguna de estas asociaciones era estadísticamente significativas individualmente. La combinación de estos 7 SNPs en una puntuación de riesgo genético global fue predictivo de conversión a EM clínica y el riesgo de recaída, lo que sugiere que, si bien los efectos de las variantes de genes individuales en el curso de la EM son pequeños, el efecto acumulativo de muchas de estas variantes es importante. De hecho, las personas con 5 o más variantes genéticas de riesgo tenían alrededor de 6 veces más probabilidades de desarrollar EM clínica durante el período de estudio en comparación con los pacientes con 2 o menos variantes de riesgo.
Esta observación aproxima el uso clínico de este tipo de información genética para, por ejemplo, predecir quién se beneficiaría de diferentes tipos de TME y quien se beneficiaría de un tratamiento agresivo precoz.

 

Fuente: Journal of Neurology, Neurosurgery & Psychiatry

Artículo original: Pan G et al. Role of genetic susceptibility variants in predicting clinical course in multiple sclerosis: a cohort study. J Neurol Neurosurg Psychiatry