BIOTEC 2004 confirma que la Biotecnología aportará nuevos y mejores fármacos
La farmacogenómica se perfila como el principal avance que aportará la Biotecnología al campo de la Medicina en los próximos años. No sólo permitirá ajustar la dosis terapéutica de muchos fármacos a las características genéticas del paciente, sino que ayudará a recuperar moléculas desechadas por inducir efectos adversos en determinados grupos de población. (23-07-2004)
Entre todos las áreas que abarca una disciplina de aplicaciones tan amplias como la Biotecnología, ha sido en salud humana donde se han producido los avances más importantes. Y el futuro más cercano depara aún muchos más progresos en este ámbito, tal y como se ha puesto de manifiesto en BIOTEC 2004, celebrado a finales de julio en Oviedo. Según se ha puesto de manifiesto en este encuentro, las compañías farmacéuticas han jugado un papel fundamental en este progreso, pues eran las que estaban mejor preparadas para utilizar las nuevas tecnologías de biología molecular.
A juicio de José Luis García, vicepresidente de la Sociedad Española de Biotecnología (SEBIOT), “son la farmacogenómica y la Medicina a la carta las aplicaciones más claras que traerá consigo la Biotecnología en el campo de la salud humana”. En nuestro hígado hay una serie de enzimas encargadas de metabolizar los fármacos y mantener el equilibrio en el organismo. Hoy ya podemos saber a través de análisis genéticos qué individuos metabolizan bien y cuáles no los medicamentos. Combinando este conocimiento con la proteómica, que estudia las propias enzimas, podremos saber qué dosis exacta de un fármaco habrá que dar a cada paciente para maximizar los efectos terapéuticos.
Al mismo tiempo, estos conocimientos permitirán ampliar el arsenal terapéutico disponible contra gran número de patologías. “Un mismo fármaco puede hacerle daño a un individuo y en otro tener un efecto beneficioso, lo que hace que todos los medicamentos se sometan a exhaustivos controles y se saquen al mercado sólo aquellos que hacen un daño mínimo a toda la población. De este modo quedan sin comercializarse muchas moléculas que podrían ser muy interesantes para amplios grupos de población. La farmacogenómica va a permitir aprovechar muchos de estos medicamentos”.
Tal y como se subrayó en este Congreso, el sector biotecnológico español tiene un alto potencial. “Si no somos capaces de crear un tejido empresarial que desarrolle nuevas aplicaciones en este campo, al menos debemos contar con especialistas bien formados que sepan sacar el máximo partido a la utilización de las tecnologías, conozcan bien los productos que tienen entre manos y no sean simples consumidores”, declaró el vicepresidente de SEBIOT.
SEBIOT, una sociedad que empezó a gestarse a mediados de los ochenta, cuenta con unos 400 socios, que proceden de distintos sectores de la Biotecnología, como la Química, la Medicina, la Veterinaria o la Ingeniería.
A juicio de José Luis García, vicepresidente de la Sociedad Española de Biotecnología (SEBIOT), “son la farmacogenómica y la Medicina a la carta las aplicaciones más claras que traerá consigo la Biotecnología en el campo de la salud humana”. En nuestro hígado hay una serie de enzimas encargadas de metabolizar los fármacos y mantener el equilibrio en el organismo. Hoy ya podemos saber a través de análisis genéticos qué individuos metabolizan bien y cuáles no los medicamentos. Combinando este conocimiento con la proteómica, que estudia las propias enzimas, podremos saber qué dosis exacta de un fármaco habrá que dar a cada paciente para maximizar los efectos terapéuticos.
Al mismo tiempo, estos conocimientos permitirán ampliar el arsenal terapéutico disponible contra gran número de patologías. “Un mismo fármaco puede hacerle daño a un individuo y en otro tener un efecto beneficioso, lo que hace que todos los medicamentos se sometan a exhaustivos controles y se saquen al mercado sólo aquellos que hacen un daño mínimo a toda la población. De este modo quedan sin comercializarse muchas moléculas que podrían ser muy interesantes para amplios grupos de población. La farmacogenómica va a permitir aprovechar muchos de estos medicamentos”.
Tal y como se subrayó en este Congreso, el sector biotecnológico español tiene un alto potencial. “Si no somos capaces de crear un tejido empresarial que desarrolle nuevas aplicaciones en este campo, al menos debemos contar con especialistas bien formados que sepan sacar el máximo partido a la utilización de las tecnologías, conozcan bien los productos que tienen entre manos y no sean simples consumidores”, declaró el vicepresidente de SEBIOT.
SEBIOT, una sociedad que empezó a gestarse a mediados de los ochenta, cuenta con unos 400 socios, que proceden de distintos sectores de la Biotecnología, como la Química, la Medicina, la Veterinaria o la Ingeniería.
